Control electrónico de potencia a medida
En los motores eléctricos tradicionales, el campo magnético necesario para la puesta en marcha se produce mediante contactos deslizantes denominados comúnmente escobillas. Los motores Torqeedo, en cambio, generan desde 2005 el campo magnético sin ningún contacto: Lo hacen mediante electrónica digital integrada en el sistema, cambiando la polaridad 35.000 veces por segundo. Ventajas de este sistema: el ángulo de tracción se adapta mejor a la carga y a la velocidad del motor haciéndolo más eficiente. Al no haber escobillas, tampoco se producen pérdidas ni se precisa mantenimiento por este concepto.
Algunos fabricantes de motores eléctricos para embarcaciones ofrecen también motores sin escobillas. En estos casos se suelen emplear controles electrónicos de potencia aptos para una gran diversidad de motores destinados a las más variadas máquinas. En los motores Torqeedo, por el contrario, el control electrónico de potencia está hecho siempre a la medida de nuestros motores; de este modo se obtiene la máxima eficiencia y potencia, y este componente se ajusta perfectamente al espacio de montaje previsto en el motor.
Aparte de estas ventajas en términos de eficiencia y de espacio, el control electrónico de potencia a la medida permite también ofrecer soluciones especiales para motores de embarcaciones. Por ejemplo, cuando la potencia es baja, nuestros controles electrónicos de potencia trabajan en base al número de revoluciones. De este modo es posible maniobrar de forma lenta y con máxima precisión. En otros casos, sin embargo, el control electrónico actúa a través del consumo de corriente: p. ej., para dotar de mayor velocidad final a las embarcaciones extremadamente ligeras. Además, la inteligente lógica del sistema de control permite adaptar automáticamente el control del motor al uso de hélices alternativas, a fin de optimizar, p. ej., la velocidad o el empuje en función de la aplicación específica.